Como en todos los lugares donde se mantiene una devoción y tradiciones en torno a una imagen de la Virgen, en Villa del Prado la gente acude cada año a celebrar las fiestas y honores correspondientes a, en nuestro caso; la Virgen de la Poveda.
Lógicamente, todo tiene un principio; todas éstas tradiciones nacen de un ántes y un después de algo que las hace surgir en un momento determinado de la historia. En cuanto a las devociones marianas o de santos hay una enorme variedad de circunstancias de origen que suelen estar determinadas por ejemplo por una aparición sobrenatural, en cuyo caso, es la propia persona de la Virgen viva la que ordena o favorece una devoción en un lugar determinado. Otra circunstancia sería la aparición repentina de la imagen material, como en el caso de la Almudena de Madrid. Otros casos serían por ejemplo la búsqueda por parte de la gente de una aldea, pueblo o ciudad de protección para cosechas, casos de epidemias, circunstancias geográficas, etc; comenzándose la devoción hacia la Virgen o santo protector.
En el caso de la Virgen de la Poveda, la tradición nos habla del origen de ésta devoción mediante una historia que se ha pasado de generación en generación en el pueblo y en la comarca.
En un pueblo de Avila que se llama Las Navas del Marqués existía hace siglos una ermita hoy desaparecida, pero cuya ubicación se conoce aún y que estaba situada junto a un arroyo que hay allí, llamado "Arroyo de la Poveda". En el centro de esa ermita se hallaban tres imágenes que representaban a las tres Marías, llamadas también "Las tres Povedanas" y la imagen que se hallaba en el centro de aquella ermita era la figura de la Virgen.
Un día, una espantosa tormenta provocó una crecida de agua en el arroyo de la Poveda y la corriente entró con violencia en la ermita y tiró la imagen de la Virgen, que quedó a merced del agua. La corriente arrastró la imagen hasta el río Cofio y de allí desembocó en el Alberche,, tras lo cual, recorriendo unos kilómetros, la Virgen se quedó enganchada en unas hojas de parra en un lugar que curiosamente también se llamaba "La Poveda", por la existencia allí de álamos cuyo nombre en latín es "pobo".
Resultó que alguien que pasaba por allí, se dice que un pastor, descubrió la imagen empapada y corrió al pueblo a contarlo. Todos acudieron a recoger la imagen y quedaron maravillados pensando que aquello significaba que la Virgen quería dar una señal a Villa del Prado para ser venerada aquí.
Al poco tiempo los vecinos de las Navas del Marqués se enteraron dónde estaba la imagen que les faltaba y la reclamaron, pero Villa del Prado, convencido de que era la Virgen la que quería quedarse en su término, no quiso devolverla, así que se entabló un pleito entre las dos localidades. Se dice que se sometió a la imagen a una prueba, situándola en otro lugar y que al dia siguiente la imagen apareció otra vez donde la parra, así que la imagen fue desde entonces conservada en Villa del Prado, construyéndose una ermita en donde había aparecido.
La historia fue publicada por primera vez en la revista "Mensajero Seráfico" de septiembre de 1914 y debió ser recogida de Villa del Prado por algún fraile capuchino que visitó nuestro pueblo y la oyó contar a los vecinos. Es una historia sencilla, pero analicémosla para sacar más jugo de ésta tradición: Primero, el lugar de origen de la imagen se llamaba "Poveda", es curioso que también se llame "Poveda" al lugar pradeño donde está hoy, en cuyo caso , aunque la palabra "Poveda" signifique "alameda", tal vez podría haber conexión entre los dos nombres de los lugares a causa de la imagen ¿o es pura casualidad y en los dos sitios había álamos?.
Algunas hipótesis dicen que ésta historia puede ser simplemente una leyenda más y ponen como alternativa el origen de la Virgen de la Poveda prescindiendo de Las Navas y ubicando en Villa del Prado por ejemplo el hallazgo de una imagen escondida en el suelo tiempo atrás o el origen de una devoción en torno a un posible pueblecillo que hubiese en la zona de la Poveda. Sin embargo, la historia del viaje por los ríos ha de tener al menos algo de cierta, pues toda leyenda lo tiene.
En cuanto al viaje, físicamente puede ser posible, pues las corrientes de agua por las que viajó la imagen estan siempre fluyendo y se comunican perfectamente entre sí. Si la imagen de entonces era por ejemplo una talla gótica, la madera perfectamente podría haber sido arrastrada y haber flotado en algunos tramos.
En el actual pedestal de la imagen se ven unos relieves que representan los momentos del hallazgo. En ellos se ve al pastor que la encontró y a vecinos del pueblo observándolo. En cuanto a aquel pleito con Las Navas, es el hecho que puede ser más concluyente en cuanto a la veracidad de la leyenda o de al menos parte de ella. Si la leyenda fuese un simple cuento ¿por qué se iban a inventar los de Villa del Prado un problema así con otro pueblo que encima está bastante lejos ¿Por qué Las Navas? ¿No seria más fácil inventarse que la Virgen estaba en Pelayos y la trajo simplemente el Alberche? O por qué se iban a inventar un viaje tan largo, si simplemente hubiese aparecido enterrada en el suelo o se hubiese erigido en torno a un pueblecillo para protegerle de las calamidades? Si hubo aquel litigio tan serio, en algún lugar, biblioteca, archivo histórico o archivo catedralicio deben conservarse documentos o actas que hablen de ello, en caso de que no hayan sido destruídos en algún momento de la historia. Si se encontrasen dichos archivos, se podría entonces asegurar por escrito y con documentos que la leyenda de la aparicion es totalmente cierta. Pero... ¿en que epoca ocurrio esto realmente? ¿Y si no se escribió nada entonces?
Para profundizar más en la historia, me dirigí a Las Navas del Marqués dispuesto a visitar el lugar de los hechos. Preguntando a varios vecinos de aquel pueblo, desconocían totalmente la historia e incluso a la Virgen de la Poveda. En cambio sí me indicaron dónde estaba el Arroyo de la Poveda, donde también habían oído decir que hace siglos hubo una ermita. Finalmente dí con una señora muy anciana que sí sabía algo de la historia de la inundación que se llevó a la Virgen, más o menos igual que lo que se cuenta en Villa del Prado.
Por último visité la zona del arroyo de la Poveda , que a pesar de ser verano, llevaba cierto caudal de agua. Todas sus orillas estaban muy verdes y unos pocos kilómetros más allá se levantaban las picudas montañas que rodean pueblos como Peguerinos, El Escorial o Santa María de La Alameda. Analicé el terreno y ví que quizá una inundación habría sido posible debido a que hace siglos llovía mucho más que ahora, al deshielo de las montañas o quizá debido a la rotura de alguna posible presilla de las que entonces había para hacer funcionar los molinos de agua. Regresando a Villa del Prado, visité la zona en que el río Cofio desemboca en el Alberche, junto a la presa de San Juan, y pensé en la cantidad de incógnitas que rodean a ésta y otras leyendas y por último pensé que creer en ellas puede enriquecernos mucho mas culturalmente. Si creemos en lo divino ¿por qué no vamos a creer algo tan sencillo como una imagen de madera flotando por un rio y quedándose enganchada en unas ramas? Además de todo, nadie jamás en Villa del Prado ha dudado de la veracidad de ésta historia y en la propia ermita se conservó hace siglos aquella rama de parra ya seca y hoy vemos los mencionados relieves en el pedestal.
En el siglo XVI se hicieron las relaciones de los pueblos de España ordenadas por Felipe II y una de las preguntas que se hacía a los vecinos de cada pueblo era si sabían algo o habían oído historia o leyenda alguna sobre la aparición del pueblo. Los transcritores de una actual edición de ésas relaciones dicen que "En algunas ocasiones, de la voz del pueblo y de sus leyendas puede averiguarse mucho más sobre el origen de algo que removiendo cien archivos"
Por Juan Durán López
Saludos desde Atoyatempan, Puebla, México donde cada 18 de abril se venera a la Virgen de la Pobeda. www.atoyatempan.net
ResponderEliminarBruto de mierda Poveda es con “ V”
EliminarBuen articulo del origen de la virgen de la POVEDA. Al igual que en villa de Prado en España, nosotros en Atoyatempan veneramos la imagen de la Santísima Virgen de la Poveda el día 18 de abril.
ResponderEliminarEs bastante curioso que el autor hubiera venido a Las Navas del Marqués y no le pudieran responder sobre la Virgen de la Poveda, pues bastantes vecinos la visitan el día de su fiesta. La leyenda es mucho más fácil de lo que el autor aventura. Las Navas del Marqués y Villa del Prado tienen el nexo de los pastores que en aquellas épocas transitaban con sus rebaños. Cuando el frío arreciaba los naveros llevaban sus ganados a tierras cálidas aprovechando las veras del río. Y cuando el calor apretaba los pastores de Villa del Prado hacían lo contrario, "devolviendo la visita". Es sabido por los vecinos que en la ermita de la Poveda, una ermita casi abandonada pues en el pueblo ya había dos iglesias y la ermita de San Antonio y prácticamente no se le tenía devoción, aparecieron los pastores y viendo a la imagen de la Virgen se la bajaron a tierras de Villa del Prado.
ResponderEliminarAl bajar los pastores naveros hicieron lo propio devolviéndola a su lugar de orígen. Pocos años después, otra vez abandonada la ermita navera, volvieron los pastores a bajarla y ya cuidaron muy mucho de que tuviera vigilancia.Y así, la leyenda se vuelve noticia corriente. En Las Navas del Marqués no cuidaron de su imagen y en Villa del Prado sí, lo que les hace merecedores de tenerla en su ermita.
Estimado comentarista anónimo, gracias por aportar su punto de vista, que es una hipótesis más de cómo la Virgen podría haber llegado a Villa del Prado, muy razonable. Lo que yo menciono en éste artículo es la leyenda tal como se cuenta en Villa del Prado.
ResponderEliminarQueremos ir a visitar a la virgen de la poveda si se va a festeja este 18 de abril por ser jueves santo?
ResponderEliminarNo, se recorre una semana, este 25 de abril.
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